lunes, 9 de febrero de 2015

"Por debajo de los 15 años no mandaría a mi hijo a un grande"

En una normativa que entra en vigor el 1 de marzo, la FIFA ha reducido de 12 a 10 años la edad mínima para exigir el Certificado de Transferencia Internacional en el traspaso de futbolistas menores de edad. El famoso artículo 19 que, según el máximo organismo mundial del fútbol, ha incumplido el Barcelona -en estudio 51 casos en el Real Madrid y otros tantos en el Atlético-, especifica bien claramente que, salvo que se cumplan tres excepciones, los menores no pueden cambiar su inscripción de una Federación a otra. A saber, "si los padres cambian su domicilio al país del nuevo club por razones de trabajo o si la transferencia es dentro de la UE debe garantizar al jugador una formación académica, escolar y educativa; además de garantizarle unas condiciones mínimas de viviendas".  




¿Se está llegando a mercantilizar demasiado el fútbol base? Se conocen jugadores que con 14 ó 15 años han pasado ya por las canteras de tres o cuatro clubes profesionales.


-Ahí las agencias de representación, que han proliferado, nos hacen a los clubes adelantar mucho las edades para tener controlados a los jugadores y que no haya ese transfuguismo. Creo que eso debería estar más regulado y tal como lo ha hecho FIFA con el artículo 19 lo debería hacer la RFEF para que la compensación económica en tales casos sea más alta. 


La actitud agresiva de algunos de estos clubes es lo que está castigando duramente la FIFA.

-Siempre ha estado sensibilizada con este tema, el tránsito de tantos jugadores sudamericanos y africanos... Los chicos cuando llegaban a Europa eran abandonados a su suerte si no encontraban equipo. Los abandonaban las empresas de representación y caminaban como zombis por distintos equipos hasta que tenían la suerte de encontrar uno estable. La FIFA va imponiendo reglas. Ya el artículo 19 lo hacía y se está endureciendo, rebajando la edad y los requisitos para que el futbolista cuando llegue lo haga bien, asentado, con su familia y no venga abandonado por una serie de delincuentes futbolísticos, que hay muchos. O ha habido muchos. También las compensaciones económicas han subido. Ya los clubes miran bastante el meterle mano a otros clubes. Se habla de cantidades de 300.000 ó 400.000 euros por unos años de formación. Yo lo veo bien y creo que la primera piedra está puesta, que es la de la FIFA, y ahora las distintas federaciones deben de ir actuando en esa línea.

En este sentido, la Andaluza sí ha sido menos permisiva que la Catalana o la Madrileña y ahí están las consecuencias para los clubes adscritos a éstas.


-Siempre ha estado muy sensibilizada y muy pendiente de los chicos que venían procedentes sobre todo de África. Han sido estrictos en la petición de papeles o requisitos, como que la unidad familiar lo acompañara, que su padre tuviera trabajo y que el chico tuviera donde estudiar con empadronamiento incluido. Otras territoriales han tenido la manga muy ancha y ahora vienen los errores que han salpicado a los dos clubes más importantes de España.


¿Y salpica a las territoriales?

-Imagino que ha habido una dejadez de funciones importante. La Andaluza ha cumplido con su cometido y la Madrileña y la Catalana han dado muchas facilidades a los clubes para que jugadores sin cumplir las reglas del juego hayan sido admitidos. Yo conozco, y podía contar, algunos casos verdaderamente denigrantes.

El Sevilla, por si alguien teme una investigación parecida, sí ha cumplido con todos los requisitos. En esto digamos que, salvo casos muy puntuales, sigue el método de captación tradicional por cercanía geográfica.


-No tenemos ningún caso. Así y todo, estamos revisando algunos, como el de Valentino (nieto de Scotta) o Tae Jun (coreano del cadete B)… pero son todos nacidos aquí. Nuestra zona de influencia yo siempre digo que es Sevilla, pero una Sevilla muy grande que ocupa Andalucía Occidental. Nos va muy bien, nos ha ido muy bien y ahí están las estadísticas. Por poner un ejemplo actual, en nuestra ciudad los últimos en saltar son Sergio Rico, de Montequinto, y Dani Ceballos, de Utrera.


El Barcelona se lleva todos los veranos entre 60 y 80 chavales. De esos han estado sin poder competir chicos que se han llevado de aquí, Ansu e Ibrahima... 

-Pero ahí están equivocados. Su padre tenía trabajo en Herrera o Marinaleda. Se trajo a su hermano y su madre. Ahí meten a todos en el mismo saco. El Barcelona y el Madrid, y si metemos al Villarreal por otro motivo también, peinan España entera y todo lo que puedan. Primero por la rivalidad entre los dos grandes. Entre ellos se matan. Hoy he leído que el coreano del Barça (Lee Sung Woo, por el que la FIFA desencadenó la investigación) lo tiene tentado ya el Madrid. En los demás clubes se peina, se observa, se ve y se compara. En la provincia de Sevilla tenemos mucha calidad, en Cádiz, Huelva... hay mucho talento y si nos alejamos más a la otra parte de Andalucía son dominantes el Málaga, el Almería y el Granada, que está resurgiendo. Hacemos cosas, pero pocas o muy puntuales por déficits que tenemos en nuestra escala de sucesiones.


Es difícil frenar una llamada de estos clubes y después hay mucho porcentaje de frustración...

-Es una llamada muy fuerte y qué duda cabe que hay un plus de emotividad y de vacileo, como decimos por el sur, que de alguna manera es lógico. Lo entiendo porque hablar de Madrid y Barcelona son palabras mayores en cuanto a club de Primera División, pero no en cuanto a cantera. Pero ellos no lo ven así. Ven a sus hijos como si jugaran al lado de Messi, Iniesta o Sergio Ramos. Yo siempre digo que es mejor que se vayan como Sergio Ramos, Jesús Navas o Reyes a que se vayan en edades muy tempranas. Cuando eso sucede pueden pasar dos cosas, que jueguen y estén contentos y no pasa nada o que no jueguen y se aburran. Si no juegan es más fácil que se aburran. Primero porque no tienen consuelo con sus familiares cuando no son citados o cuando son eternamente suplentes. Segundo, cuando tienen un fin de semana sin nadie y pasa el tiempo y no van citados están locos por volver a su casa. Porque como en casa no se está en ningún lado. 


Yo siempre les digo a los padres, cuando vienen con una oferta, que no hay ningún problema. "Váyase y cuando vuelva tendrá las puertas abiertas. Pero sepa usted que allí se va a acostar con uno que no conoce, que va a comer a rancho, que perderá el entorno escolar de amistades, de novias...". Están en un sitio que está muy bien porque Valdebebas  y La Masía son un espectáculo, pero lo tienen que llevar en autobús a todos lados. A nosotros todo eso también nos lo pueden achacar, pero nosotros tenemos sólo 20 futbolistas en residencia. De los cuales 10 u 11 son de División de Honor juvenil y ya están preparados para, cuando menos, llegar al Sevilla Atlético. No es lo mismo un cadete, un infantil o un alevín fuera de su casa soportando la ausencia de sus seres queridos. De 15 años para abajo yo me lo pensaría muy mucho si fuera mi hijo.

-¿En cantera desde fuera prima el resultado a la formación? 

-Es lo primero que te llama la atención pero luego hay un trabajo de formación importante. Tiene que ir unido formación y competición, igual que los resultados. Con un mejores resultados es mejor la formación. Un estudiante que saca 10 constantemente se motiva. Uno que suspende le coge asco seguro. Si pierde más que gana le cogerá asco a los entrenamientos, al entrenador, al fútbol... Si ganas entrenas con más alegría, riendo, el entrenador es mejor, los compañeros, y ves reflejado en la clasificación que tu trabajo se ve recompensado.Todos los jugadores son resultadistas. El futbolista es ganador, desde chico competimos para ganar, para ser el primero en la clase. Es más feliz el que tiene mejores resultados que el que no.


diariodesevilla.es/